- Ofrecerá a los visitantes primeros auxilios sanitarios, sensibilización en las buenas prácticas ambientales y divulgación de medidas de prevención frente a la Covid.
- El proyecto está financiado por el MITACO y cuenta con la colaboración de Organismo Autónomo Parques Nacionales y Ayuntamiento de Torla.
- En la pradera de Ordesa habrá un puesto de primeros auxilios, desfibrilador y ambulancia 4×4.
Cruz Roja va a desarrollar este próximo mes de agosto un proyecto de voluntariado ambiental en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido con el que pretende ofrecer a los visitantes primeros auxilios sanitarios, sensibilización en las buenas prácticas ambientales y divulgación de medidas de prevención frente a la Covid.
El proyecto, impulsado desde el área de Medio Ambiente de la asamblea provincial de Huesca, cuenta con la financiación y colaboración del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITACO), Organismo Autónomo Parques Nacionales, Parque de Ordesa Monte Perdido y el Ayuntamiento de Torla, entre otros apoyos.
Esta iniciativa nace del compromiso de Cruz Roja con el Medio Ambiente y con las personas. En línea con el espíritu de la institución de ayudar siempre a quien lo necesita, el objetivo es también estar en este entorno protegido para llevar a cabo tres misiones fundamentales: La primera, dar a los visitantes unos primeros auxilios sanitarios ante todo tipo de percance que puedan sufrir, puesto que en cualquier momento puede surgir una situación en la que la vida o la integridad física de una persona esté en riesgo. A veces, basta con una acción sencilla, realizada en el instante preciso y de la manera adecuada, para resolverla. Cruz Roja va a estar en el Parque para prestar este auxilio urgente: desde hacer la Reanimación Cardio Pulmonar (RCP), intervenir correctamente a una persona herida o enferma, hasta ayudar en una caída inoportuna o tratar la picadura de un insecto.
Para todo ello, habrá un puesto de socorro en la pradera de Ordesa en el que se dispondrá del equipamiento necesario para intervenir ante una urgencia sanitaria; se contará también con una ambulancia 4×4 que permitirá el traslado de la persona afectada, en caso de necesidad y se ha instalado un desfibrilador.
La segunda misión será la de sensibilizar a los visitantes en las buenas prácticas ambientales. Está previsto que el voluntariado de Cruz Roja recuerde a los visitantes al Parque la normativa que rige en el mismo para su preservación, como es la prohibición de arrojar residuos, perturbar la tranquilidad de la naturaleza, llevar perros sueltos, bañarse en ríos o ibones o coger plantas, rocas o cualquier otro elemento.
En tercer lugar, el voluntariado de Cruz Roja también tiene previsto incidir en la divulgación de medidas preventivas frente al coronavirus, porque también en la naturaleza es de vital importancia mantener bien puesta la mascarilla si no se puede mantener la distancia social de seguridad, no arrojar mascarillas u otros residuos al suelo o a los ríos y lagos, mantener higiene de manos, etc.
Reunión preparatoria en Torla
Para ultimar detalles y estrechar la colaboración, ayer tuvo lugar en Torla un cordial encuentro entre su alcalde, Miguel Villacampa; la directora del Parque Nacional de Ordesa Monte Perdido, Elena Villagrasa; y el vicepresidente provincial de Cruz Roja, Bernardo Más; el coordinador, Sifro González y el técnico de Medio Ambiente, Fernando Sarvisé. Entre todos perfilaron diferentes aspectos y Cruz Roja agradeció a ambos responsables todo el apoyo y colaboración prestados al proyecto, que arranca el próximo día 1 de agosto.
En el marco de este programa, durante la pasada primavera Cruz Roja impartió cursos de formación en primeros auxilios y uso y manejo del desfibrilador a los trabajadores del Parque de Ordesa Monte Perdido, con el que mantiene una estrecha colaboración.